Los suecos todavía no se han olvidado de Le Corbusier. En 1933, el arquitecto tuvo la ocurrencia de tirar abajo el centro de Estocolmo para crear una urbe moderna, con torres y rascacielos que permitieran responder al boom demográfico gracias a la verticalidad, así como grandes avenidas cerradas a la circulación para favorecer la calidad de vida. Pero ganó la piedra decimonónica y el proyecto no fue seleccionado. “Sabía que nunca le darían el encargo. Fue una provocación teórica, pero también una estrategia para venderse a sí mismo”, explica Jean-Louis Cohen, profesor de la New York University, uno de los mayores expertos en el arquitecto y comisario de Moment. El laboratorio secreto de Le Corbusier,la nueva exposición inaugurada en el Moderna Museet de Estocolmo, con el objetivo de inspeccionar el proceso creativo del arquitecto francosuizo.
Es la primera de las numerosas muestras que, a lo largo de este año, reexaminarán el legado de Le Corbusier, avanzándose a la próxima efeméride de envergadura, la conmemoración dentro de dos años del 50º aniversario de su muerte. El MoMA de Nueva York se anticipará al calendario con su primera muestra sobre el arquitecto, prevista para mayo y destinada a convertirse en su blockbuster estival, que se apoyará en numerosos documentos de su archivo personal, de las acuarelas pintadas durante sus viajes de juventud a los esbozos del paisaje indio que inspiraron la construcción de su ciudad utópica en Chandigarh, la capital del Punjab.
A finales de abril, se inaugurará en Bruselas una muestra sobre Le Corbusier y la fotografía, que abordará cómo se sirvió de la disciplina para documentar sus proyectos, pero también para publicitar su trabajo e incluso su persona, reclutando a artistas tan reputados como René Burri y Lucien Hervé. En Marsella, ciudad impregnada de su legado urbanístico, una exposición sobre Le Corbusier y la herencia del brutalismo abrirá sus puertas en octubre. Todo ello, mientras sigue abierta la muestra sobre sus proyectos italianos en el MAXXI de Roma, y al tiempo que ocupa un papel protagonista en otra exposición sobre la evolución del oficio de arquitecto que todavía puede visitarse en la Pinacoteca Moderna de Múnich.
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