21
Nov

La Paradoja del Prefacio

Written on November 21, 2007 by Julián Montaño in Literature

Julián Montaño

Miguel

Ahora que Miguel va a presentar su libro Tradición Órfica y Cristianismo Antiguo, a Miguel le puede pasar lo siguiente. Miguel en su libro afirma X proposiciones, P1, P2, P3, etc., P1…Pn para resumir. Si preguntáramos proposición por proposición a Miguel, nuestro autor diría sin reparos: "P1 es verdadera", "P2 es verdadera"…Pn. Ya sabemos por las reglas generales de la lógica que si una proposición P es verdadera y, por otro lado, otra proposición Q es verdadera, entonces la proposición "P y Q " ( P^Q) es verdadera (si “el pescado está congelado” es verdad y “ el pescado está muy bueno” es verdad, entonces “el pescado está congelado y está muy bueno” es verdad); y entonces Miguel piensa que "P1 ^ P2 ^…Pn" es verdadera, o sea que piensa que todas y cada una de las afirmaciones de su libro son verdaderas (si no, nos estaría engañando, claro).

Sin embargo en los prefacios los autores introducen siempre una disculpa por los errores cometidos “…todo lo que no sea verdad se debe enteramente a mi pluma” o “agradezco a fulano tal y tal y todo lo que sea erróneo es enteramente mi responsabilidad” y cosas así que introducen cuando hacen los agradecimientos en los prefacios y prólogos. Si lo hacen significan que dicen que "hay al menos 1 proposición P en el conjunto P1…Pn que no es verdadera" (V(p) ( P = miembro de P1…Pn ^P = F ; que -recordemos- se lee: hay al menos una proposición P tal que P es miembro del conjunto P1…Pn y además P no es verdadera). Pero esto es inconsistente con creer que todo lo que dice el libro de uno es verdadero. Estas diciendo: “las bolas que hay en esta bolsa son sólo dos, la bola 1 y la bola 2; la bola 1 es negra, la bola 2 es negra, ah, bueno se me olvidaba, hay una bola que es roja”.

Esta es la Paradoja del Prólogo o del Prefacio y sirve para ilustrar de una manera gráfica la inconsistencia de creer que tu conjunto de creencias es revisable y sin embargo mantener tus creencias como creencias (si las mantienes como creencias es porque piensas que son verdad, si no serías irracional). Sin embargo es verdad que mantenemos nuestro conjunto de creencias como revisable (y todos aquellos que sean liberales empedernidos a lo Hayek o a lo Popper no digamos) y es verdad que no mantenemos una creencia a sabiendas que es falsa.

Pero bueno en cualquier caso la paradoja también indica que los lógicos son insensibles a las buenas maneras y no que Miguel, por ejemplo, que habrá escrito un prefacio maravilloso, sea un ser paradójico e inconsistente. Disculparse por los errores cometidos no es a veces cuestión de creencias fundadas, sino de buenas maneras, porque está claro que el libro de Miguel está lleno de proposiciones maravillosas y fascinantes y sobre todo verdaderas. Ah, por cierto, las buenas maneras tienen que ver más con la lógica de lo que se piensa, prometo un post sobre buenas maneras y Philosophy of Mind.

Comments

No comments yet.

Leave a Comment

*

We use both our own and third-party cookies to enhance our services and to offer you the content that most suits your preferences by analysing your browsing habits. Your continued use of the site means that you accept these cookies. You may change your settings and obtain more information here. Accept